Aunque pueda parecer lo contrario, el papel tiene futuro. La prueba está en que año tras año aumenta el número de franquicias de papelerías y material de oficina. Entre las ventajas de este tipo de negocio se encuentra la demanda estable todo el año, con incremento en épocas clave. No obstante, si queremos sobrevivir en el mercado, lo ideal es renovarse.
Según el Informe 2017 de “La Franquicia en España” elaborado por la Asociación Española de Franquiciadores (AEF), en 2016 eran 24 las franquicias que operaban en este mercado, dos más que en 2015. En cuanto a los establecimientos, contaron con 1.110 en total en 2016, mientras que en 2015 fueron 976.
Asimismo, la facturación total del sector en 2016 fue de 273,8 millones de euros. Esto supone un aumento de 27, 7 millones de euros respecto a 2015. Finalmente, en 2016 dio empleo a 3.137 personas (347 más que en 2015). Estas son pruebas de su éxito.
Además, son cifras para las que las franquicias han recurrido a la comercialización de todos sus productos a través de otras vías, como el telemarketing, venta por catálogo, venta por Internet, etc. Algo normal si tenemos en cuenta que mantener el gran número de productos que comercializan este tipo de negocios en sus establecimientos es muy difícil. Estos sistemas de comercialización, como los catálogos o los folletos de venta a distancia de papelería y material de oficina, se han convertido en el equivalente empresarial del buzoneo doméstico que realizan los hipermercados.
En franquicia, las posibilidades de un establecimiento de estar a la orden del día a este respecto se multiplican. Gracias a las ventajas que ofrece pertenecer a una gran cadena que invierte en investigación, desarrollo de productos y sistemas logísticos. De esta manera, se garantizan buenos precios, factor influyente en los clientes.
Un reto para las franquicias de papelerías
Sin embargo, la gran distribución supone todo un reto al que tienen que enfrentarse estas cadenas de franquicias. Que ocupan una parte muy importante del mercado y aprovechan la necesidad de las compras de gran consumo para ofrecer productos de papelería y material de oficina. Y, en consecuencia, haciendo inviables muchos negocios de corte tradicional.
No obstante, el sector de las franquicias de papelerías y material de oficina sigue siendo muy atomizado. Lo que supone una gran oportunidad de crecimiento para las redes en franquicia. De esta forma, la franquicia se ofrece, en similitud de condiciones de los grandes operadores del mercado, como tabla de salvación. En concreto de unos negocios que, de no actualizar sus estructuras, terminarán desapareciendo. A pesar de operar en un mercado de clara expansión.
El papel y mucho más
Una de las ventajas de las franquicias de papelerías y material de oficina es que cuentan con una demanda estable durante todo el año. Esto es debido a que se trata de materiales necesarios para el trabajo diario de miles de personas de todas las edades. Así, ciertas épocas ayudan a que aumente el volumen de ventas de estas empresas. Entre ellas, la “vuelta al cole” de los pequeños o festividades como las navidades.
Una de las bazas importantes que utilizan las redes en franquicia es la producción de material de marca propia. Más barato que el resto. Asimismo, la economía de escala resulta otra ventaja a la hora de abrir una franquicia de este sector. De esta manera, al contar con una gran red, la logística se organiza de tal manera que abarata costes en los productos. Alcanzando así un precio más asequible para el cliente final.
Por otra parte, el negocio de papelería y oficina permite un contacto directo con el público. Que supone una cercanía con el cliente. Por ello, los empleados deben tener las nociones necesarias para satisfacer las dudas de la clientela.
Desarrollo sostenible
El de papelerías es un sector que continúa en proceso de reconversión. Por un lado, se está apostando por locales de mayores dimensiones. Y así poder ofrecer al público una oferta más amplia y variada. Entre la que se incluyen servicios como los de reprografía o diseño gráfico. Que llevan aparejados mayores necesidades de equipamiento y espacio para el mismo.
Se puede afirmar, por tanto, que los conceptos encuadrados dentro de este segmento se constituyen como una opción de inversión interesante. Y muestra de ello es que, año a año, el crecimiento del número de establecimientos en funcionamiento aumenta considerablemente.