La excelencia del chocolatero belga en España
A los 14 años, Joseph Draps entró en el negocio familiar. Fue entonces cuando desarrolló su talento creativo como maestro chocolatero, que le decidió a crear una marca de chocolates de prestigio.
Nace así la franquicia Godiva hace más de 75 años, con una primera tienda en una calle aneja a la Grand Place de Bruselas. Desde entonces Godiva se ha convertido en sinónimo de máxima calidad. Gracias principalmente a su forma elegante de hacer chocolates, al diseño de su packaging y a la fuerza de sus campañas de publicidad.
La franquicia Godiva por el mundo
En Norteamérica existen más de 3.000 puntos de venta de la marca. Y en Europa, Oriente Medio y Asia, la franquicia Godiva se distribuye en tiendas propias, mostradores en grandes almacenes y tiendas franquiciadas. Además de aeropuertos internacionales.
De las 35 tiendas franquiciadas en Europa y Asia, una funciona en Barcelona desde hace 15 años. Godiva quiere aumentar su presencia en España. Y para ello busca a emprendedores que quieran incorporarse a un negocio de renombre y que trabaja en un sector en alza (el consumo de chocolate aumenta cada año). La franquicia Godiva es un negocio sin royalties, con un canon de entrada bajo. Además, proporciona importante apoyo de la Central, marketing visual y promociones exclusivas.